

Mientras estoy en mi cama te pienso y te escribo:
Nunca he sido poeta pero de tanto leer poesias y escuchar canciones de amor, nacen estas letras para ti, estan llenas de esperanzas e ilusiones, porque deseo que tus ojos lean lo que mi corazon no puede hablar. Mis manos se vuelven lentas a la hora de escribir, pero cuando quiero decirte cuanto te amo, entonces todo sale muy rápido y paso de la pena a la alegría, porque sé que leerás esta carta que te estoy escribiendo.
En estos días que no se si hace calor o frío me dan muchas ganas de escuchar musica, como aquellas canciones que siempre decimos que son nuestras. Sí mi amor, pongo musica y mi mente vuela mientras sueño... ¡Sí sueño mucho con tus besos! Sueño con tus caricias, esas que estan pendientes en algun lugar del calendario.
Así es nuestro amor, nuestros versos, nuestros escritos, sin rimas, sin sonetos, sólo un sentimiento que cada día se va sintiendo con mayor fuerza, y te lo digo amor mío... Este cariño no para de crecer, mira que sin ser poeta pueda escribir todas estas cartas y las envío porque una carta no puede quedar sin enviarse, no se debe dejar esperando a quien tanto se ama.
Llegaste a mi vida cuando no te esperaba, me amaste tal como era, sin preguntas, sin respuestas, sólo un amor que nació en nuestros corazones y allí quiere quedarse. No quiero dejar de decirte que te amo, me enamoras el alma, siendo tu mismo, toda dulzura, eres mi estrella, esa que brilla cuando mis noches son muy oscuras, todos mis rincones dicen tu nombre, no amarte es imposible.
Así te quiero, asi te amo, siempre tuya, siempre mio, siempre nuestro.
Para Mario Espinosa